Un gesto tan simple como lavarse las manos con agua y jabón es clave para prevenir cuadros diarreicos e infecciones respiratorias que, en grupos de población sensibles como niños, pueden acarrear graves consecuencias.
Este hábito debe estar presente no sólo en la escuela sino también en nuestra vida diaria
- Hay que lavarse las manos Por qué: en su superficie y entre los dedos viajan compañeros no deseados, los gérmenes patógenos que lo tienen fácil para hacernos enfermar, causándonos infecciones grastrointestinales, conjuntivitis, catarros y gripes, infecciones en heridas…
- Cuándo hay que lavarse las manos: es muy importante hacerlo en los siguientes momentos:
- Antes de cocinar y/o comer
- Después de haber acariciado a mascotas
- Antes y después de haber usado el WC
- Después de haber jugado en la calle
- Después de haber usado el transporte público
- Antes de tocar a un bebé
- Cómo se lavan bien las manos: no basta con un simple enjuagado con agua, para retirar los restos de suciedad y de gérmenes debemos dedicarle entre 15 y 20 segundos y seguir los siguientes pasos:
- Mójate las manos y no olvides cerrar el grifo para no desperdiciar agua
- Aplica jabón por el dorso, la palma y entre los dedos sin olvidar las uñas
- Aclara bien los restos del jabón y si es necesario repite el proceso
- Seca con toalla, papel, secador o agitándolas